miércoles, 6 de septiembre de 2023

La dama oscura

 



Cosmovisión amazónica. Guillermo Arévalo


No me refiero a los veintiséis sonetos de Shakespeare dedicados a la dama oscura. El poeta cantaba el amor a una mujer que no destacaba por su belleza, el modelo de belleza de entonces. Su dama oscura era una mujer de carácter veleidoso, infiel que no perdía ocasión de menospreciarlo. Tales traiciones amorosas no mermaban su  entrega y delirio por la dama. 

Exactamente lo que ocurre hoy. Escribe el filósofo David Fideler, en su libro Restaurar el alma del mundo, publicado por Atalanta, que nuestros pensamientos giran en torno a la imagen que nos hemos hecho del mundo. La imagen de la época en la que vivimos, de su naturaleza, es el origen  que está presente en el pensamiento de este periodo de tiempo histórico. La cosmovisión ha sido siempre el substrato de las creaciones artísticas, inventos, tecnologías y la manera que tenemos de relacionarnos entre humanos. Nuestra generación arrastra la imagen nefasta del mundo del siglo XXI ¿Cómo librarnos?    

La dama oscura es la realidad que percibimos plagada de peligros, amenazas, traiciones, malos augurios y sin embargo, en vez de abominar de ella nos atrae fatalmente. Nos hemos convertido en adictos a las malas noticias, reales o inventadas. Este verano del 2023 ha sido la versión posmoderna de esta estrofa del soneto shakesperiano: 

Dos amores poseo, consuelo y desespero, 

que como  dos espíritus en mí, tienen influencia

Es el ángel honrado, muy bello caballero

es el ente malvado, dama de oscura esencia (versión  poética de Alba Bonastre

Sin tiempo  que perder, oscilamos entre el desespero y la necesidad de consolarnos con la esperanza de un tiempo futuro más amable para la humanidad. La dama oscura parece que ha extendido su influjo sobre la sociedad y ya muy pocos creen que nos libraremos de sus trapacerías y maldiciones. Nada es permanente y como hubo otras cosmovisiones, así estará naciendo otra muy distinta, en algún lugar del planeta. Necesitamos inspiración para cambiar la mirada. Será la creación artística, la ciencia sin intereses económicos que la envenenen, la tecnología sin codicia y un espíritu desafiante y alegre, las manos que apartarán la dama oscura de nuestro camino.